martes, 10 de mayo de 2011

Con el tiempo vas a entender que un beso no es un contrato y un regalo no es una promesa, con el tiempo vas a entender que no se besa con la boca, sino con el corazón; y una caricia sincera no toca la piel, sino el alma, si no es así no vale de nada.

2 comentarios:

  1. Alguien que se preocupó por mi esa vez que estuve mal y logró hacerme llegar sus palabras

    ResponderEliminar